sábado, 20 de diciembre de 2008

El Salvador se abstiene de condenar la homofobia

Tomado de Diario El Mundo

Redacción/ EFE
Diario El Mundo

La representación salvadoreña en Naciones Unidas se abstuvo ayer de respaldar una declaración contra la homofobia y la discriminación basada en la orientación sexual o identidad de género, que sí consiguió la firma de 66 Estados miembros de la organización mundial.

Francia, acompañada de Holanda, presentó por primera vez oficialmente a consideración del órgano de Naciones Unidas un documento de esta naturaleza, en el que se llama a abandonar la discriminación legal y social de los homosexuales, lesbianas y transexuales.
"No queremos imponer un tipo particular de modelo de sociedad, pero sí que nos pronunciemos en contra de la intolerancia", aseguró la viceministra de Derechos Humanos de Francia, Rama Yade, en un acto en la sala del Consejo Económico y Social de la ONU (ECOSOC).

El texto de ayer –promovido por Argentina, Brasil, Croacia, Francia, Gabón, Holanda y Noruega – fue presentado a la Asamblea General de la Organización por el embajador argentino, Jorge Argüello.

“Urgimos a todos los Estados a tomar todas las medidas necesarias, en especial legislativas o administrativas, para garantizar que la orientación sexual o identidad de género no sirvan bajo ninguna circunstancia como base para sanciones penales –en especial ejecuciones –, arrestos o detención”, apunta el documento.

El texto se apoya en la Declaración Universal de Derechos Humanos, que establece la libertad e igualdad de todas las personas.

Pero fuentes de cancillería salvadoreña aseguraron que el país no respaldó la iniciativa que contó con el rechazo de El Vaticano y varias naciones árabes.

“El Salvador quedó en el grupo de países que se abstuvo”, dijo una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores que declinó ser identificada.

El ministro de Exteriores holandés, Maxime Verhagen, reconoció que la declaración solamente cuenta a esta altura con el apoyo de un tercio de los miembros de Naciones Unidas.

Sin embargo, dijo a renglón seguido, el hecho de que por primera vez se hable en este marco sobre la discriminación por la orientación sexual "ha dejado de ser un asunto tabú en Naciones Unidas".

Verhagen indicó que se considera que entre el 5 y el 10 por ciento de la población mundial es homosexual.

"Eso significa que a cientos de millones de personas se les violan sistemáticamente sus derechos humanos", agregó.

La lectura de la declaración en el pleno de la Asamblea General generó una réplica por parte de la Misión de Siria ante la ONU por considerar que es una injerencia en los asuntos internos de naciones soberanas.

La delegación diplomática árabe aseguró contar con el respaldo de 62 países dispuestos a votar en contra del documento.

Los promotores de la declaración recordaron que los actos homosexuales se consideran delito en las legislaciones de más de 80 naciones, en muchos casos como reliquias de la leyes de sodomía coloniales, y en siete de ellos se pueden castigar con la pena de muerte.
A ello se une la marginación social, la discriminación y las agresiones que se producen por motivos de orientación sexual, que muy raramente son combatidos por las autoridades, agregaron.

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos (ACDH), Navanethem Pillay, respaldó la declaración "por completo" en un mensaje grabado que se presentó durante el acto en el ECOSOC.

Recalcó que el texto se enmarca dentro de los principios de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, de la que se acaban de celebrar el sesenta aniversario.

"A ningún ser humano se le puede negar sus derechos humanos simplemente por percepciones sobre su orientación sexual o su identidad de género", afirmó.

La ex magistrada sudafricana instó a dejar atrás el cliché de que "todos somos iguales, pero algunos son más iguales que otros" que ha servido para que la Declaración de los Derechos Humanos se aplique de forma desigual.

Sin embargo, el embajador de Sudáfrica ante la ONU, Dumisani Kumalo, cuestionó la necesidad de presentar este tipo de propuestas en las que "se condena lo que hacen los otros".

"No creemos en tomar la palabra para humillar a otros países porque eso divide a la ONU", señaló.

Kumalo aclaró que su país apoya la despenalización de la homosexualidad, tal como recoge su Constitución, pero rechazó "evangelizar en contra de países que funcionan de otra manera".

El intento de aprobar una declaración universal en contra de la penalización ha sido objeto de polémica desde que Francia hizo saber su intención de acudir por primera vez con un documento concreto a la Asamblea General.

Las declaraciones el pasado 1 de diciembre del arzobispo Celestino Migliore, observador permanente del Vaticano en Naciones Unidas, contrarias al documento de Francia desató una airada protesta en Italia, que obligó a la Santa Sede a clarificar que favorece la despenalización del comportamiento homosexuales, pese a estar en contra del matrimonio del mismo sexo.

martes, 2 de diciembre de 2008

El Vaticano se opone a despenalizar la homosexualidad

Esta nota se ha tomado del periódico El País, de España

Mauro Mora

El Vaticano es contrario a la propuesta, que presentará en breve Francia ante la ONU, en nombre de los 25 países de la Unión Europea, para despenalizar la homosexualidad en el mundo. El arzobispo Celestino Migliore, representante de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, afirmó ayer desde Nueva York que "una declaración política de ese tipo crearía nuevas e implacables discriminaciones", y, a la vez, "pondría en la picota a los países que no consideran matrimonio las uniones homosexuales". "Si se aprobara", atacó Migliore, "esos países serían presionados".

El Vaticano está a favor, declaró Migliore a la agencia de noticias religiosas Imedia, de "todo aquello que defiende a las personas porque forma parte de nuestro patrimonio espiritual y humano", y el "Catecismo de la Iglesia es partidario además, desde hace tiempo, de evitar toda marca de injusta discriminación contra las personas homosexuales".

Pero el proyecto que prepara Francia es una cosa distinta, ya que la declaración "pedirá a los Estados y a los organismos internacionales de control de los derechos humanos que añadan nuevas categorías [de personas] protegidas, sin tener en cuenta que, al adoptarlas, crearán nuevas discriminaciones".

En los meses pasados, como presidente de turno de la UE, Francia había anunciado que presentará a la ONU una iniciativa por la "despenalización universal de la homosexualidad", y según ha avanzado la secretaria de Estado de Derechos Humanos, Rama Yade, lo hará el próximo 10 de diciembre, con ocasión del 60º aniversario de la Declaración de los Derechos del Hombre.

Las palabras del embajador vaticano ante la ONU parecen un evidente intento de presionar por adelantado contra la idea. Arcigay, asociación de gays y lesbianas italianas, dijo ayer, a través de su presidente, Aurelio Mancuso, que "gracias a la posición particular de que disfruta el medieval Estado Vaticano ante la ONU, el lobby clerical aprieta a los Estados para que no reconozcan los derechos civiles y de libertad de los homosexuales, aliándose así con los regímenes dictatoriales, de todos los colores, incluidos los islámicos".

Arcigay recuerda que la propuesta de despenalización, que ha sido suscrita también por Italia, quiere acabar "con la vergüenza de que en 91 países del mundo se establezcan multas, torturas e incluso ejecuciones (en ocho países islámicos) contra los homosexuales"

"Es de una gravedad extrema que el Vaticano, y, por tanto, la Iglesia católica entera, se mueva para que la propuesta no se apruebe, lo que sería un verdadero acto de condena a muerte contra los millones de gays y lesbianas que tienen la mala suerte de vivir en países sanguinarios", declaró Mancuso a la agencia Ansa.