Hemos llegado al final de otro año y tal parece que la suerte de la población homosexual en el país no ha cambiado mucho. Bueno, quizá algo, pero muy poco.
Este año me he enterado de que la población gay en el país ha ganado míseras conquistas, y en ello mucho han tenido que ver los jóvenes homosexuales que cada vez tienen menos temor a mostrar su orientación sexual.
Es más común ver a jovencitos desafiando la censura moral y salir a las calles tal como son. Los medios de comunicación, aún arropados por el velo moralista y discriminante, han cedido un poco y ya vemos mensajes de textos en algunos canales, donde jóvenes manifiestan su preferencia sexual y hacen invitaciones para conocer gente.
Son pequeños palmos de tierra que poco a poco se van conquistando. Pero todo comienzo es difícil.
Ahora hablar de homosexualidad es más común, así como hablar de penes y vaginas, que antes eran palabras tabú.
Los cambios son pocos, pero importantes. Espero que el próximo año la comunidad homosexual siga adelante en la misión de que todos seamos aceptados y tolerados por esta nuestra sociedad.
Feliz año nuevo.