viernes, 17 de julio de 2009

La discrimación es casi una cuestión genética en El Salvador

Bueno, es extraño que un país esté expulsando a su gente por décadas. Eso significa que las cosas no andan bien.
Fíjense que meditando sobre esto, llegué a la conclusión de que El Salvador es un país terriblemente discriminador, que expulsa a todo aquel que no es del círculo dominante o que no se somete a éste.
Miren, en El Salvador es común que se vea con desprecio a la gente pobre. Es válido sacar de un restaurante caro a los malvestidos. Los empleados verán con grandes ojos a algún ciudadano pobre que vaya llegando al lugar.
La discrminiación de los pobres es una situación escandalosa que uno se percata hasta cuando ha salido de su país, como es mi caso, que resido en la actualidad en Estados Unidos. Cuando uno vive en su país, pues parece natural esta discriminación.
Este fenómeno creo que viene desde el tiempo de la colonia, cuando los españoles miraban con desprecio a la población local, sentimiento que se ha seguido prolongando a lo largo de la historia.
Este ideología ahora la comparte la clase dominante, que se ha encargado de propagarla constantemente. No es raro entonces que se discrimine todo aquello que no vaya con los patrones morales de esta clase y se vea como inferior a los pobres, los analfabetas, los homosexuales y a todos los que no compartan esta ideología. A los "igualados". Vaya palabrita.
Me acuerdo que en bachillerato, (increible) se me enseñó sobre la estratificación social: clase alta, media y baja, y quizá la maestra no había entedido el espíritu de la asignatura, pues comenzó a clasificarnos, al final, yo era de clase baja-media. !Qué estúpido!
Pero así es, la discriminación es una cuestión muy natural en El Salvador. Por supuesto, siempre ha habido gente que no está de acuerdo con esta ideología y es por eso que en el país han habido masacres y guerras... y exiliados.
Están los exiliados políticos, los exiliados económicos y los exiliados por orientación sexual.
En esos últimos me encuentro yo. Acá en Los Angeles, me encuentro con muchos salvadoreños homosexuales, que quizá no saben con certeza por qué abandonaron su país, pero conversando con ellos, es obvio que no se sentían libres, que estaban insatisfechos con sus vidas, que sentían muy pesada la carga de las recriminaciones sociales y de sus familias sobre su comportamiento sexual. O que vivían encerrados en esa camisa de fuerza heterosexual a la que muchos se ven sometidos a vivir.
Si nuestra sociedad no termina de cambiar de mentalidad, creo que muchos salvadoreños más seguirán abandonado su patria, para buscar tolerancia en otras partes.

miércoles, 1 de julio de 2009

La marcha de los invisibles


Foto de www.elsalvadorg.com

Como estoy lejos de mi país, la única forma de enterarme de lo que acontece es por medio de los periódicos locales. El lunes me puse a buscar información sobre la marcha del orgullo gay que se celebró en San Salvador el 27 de junio, y para mi sorpresa, ninguno de los medios escritos más grandes del país publicó nada. Sólo en el periódico electrónico Elfaro.net apareció una galería de fotos.
Quizá hay demasiada información que presentar en estos últimos días, como la muerte de Michael Jackson, el golpe de estado en Honduras, la crítica constante al presidente Funes o la incapacidad de los diputados en elegir a los nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia y Fiscal General de la República.
A Pesar de la invisibilización que algunos sectores reaccionarios y homofóbicos pretenden hacer de la comunidad homosexual de El Salvador, ésta, por el contrario, cada vez se fortalece más y tiene más presencia en la sociedad. Poco a poco van surgiendo más negocios que han visto el potencial de la comunidad y han comenzado a ofrecer servicios específicos, esto a la vez, ha conllevado al surgimiento de nuevas organizaciones que velan por nuestros derechos.
Si quieren ver más fotografías del evento, vayan a la página de www.elsalvadorg.com o a la galería de Elfaro.net.

También hay un video que pueden ver: